Aquellos con los que Dios está

Dios prometió a la humanidad sus bendiciones, interponiendo juramento.

Jacob y otros antepasados de la fe recibieron las bendiciones de Dios sin importar lo que hicieran. Ellos pudieron hacerlo porque creían firmemente en la promesa de Dios y llevaron a cabo su palabra. En la época del Espíritu Santo, Dios también concede sus bendiciones prometidas a los miembros de la Iglesia de Dios, quienes creen en la promesa de Cristo Ahnsahnghong y Dios Madre, y cumplen con el método de recibir sus bendiciones.